Lo efímero en Internet

¿Donde van las webs y blogs muertos?. Y es que seguramente se habrán fijado en la cantidad de páginas victimas de las modas del momento, la desidia o el olvido, que abundan en nuestra Internet. Webs que aún indican un copyright del año 1999 o 2000... y con contenidos caducos o debería decir realmente, webs muertas, abandonadas, e incluso vacías.

Tengo la sensación de que la cantidad de páginas abandonadas por sus creadores, por la pérdida de interés por parte del autor, casi siempre, o por cualquier otro motivo es elevado. La certificación de la muerte de un blog no existe hoy por hoy. ¿Cuánto tiempo tiene que transcurrir sin que haya una modificación para que se considere que un blog ha muerto? Cuántos blogs han quedado sepultados en la web, sin nadie los actualice y lo que es más triste sin que nadie los lea.

Los sitios webs deberían de incorporar un sistema de autodestrucción y dejar paso a los nuevos. Basura digital, eso es en lo que se convierte esa cantidad de "escombros" que satura internet. Y lo más preocupante y grave es que siguen contabilizandose en las búsquedas de Google, por ejemplo, parasitando y falseando las búsquedas.

Todo el mundo tiene derecho a tener su sitio web en Internet, para comunicar, expresarse, divertirse... lo que sea, pero que sea con calidad, y si carece de actualización en un tiempo prudencial (digamos un año) que desaparezca.

Blogs y más blogs inundan internet con un contenido y finalidad como menos dudosos y cuestionables. Y no critico el hecho en si, sino la vigencia de dicho acto. En ocasiones, al navegar, te topas con sitios webs que reflejan por su diseño y contenido una época, unas tendencias y unas moda y no deja de ser a la par que nostálgico, simpático en algunos casos. Más que tener un blog se trata de tener algo que contar en el... digo.

El número de blogs "vivos" respecto al total disminuye poco a poco. La tecnología se ha democratizado y surge la llamada sociabilización de los contenidos. El grado de lectura de los blogs disminuye ya que todos opinamos y cada vez leemos/nos leen menos. Una legión de predicadores en el desierto. Un mar de blogs sin interés o calidad. Un ejercito de naúfragos a la deriva... A modo de ejemplo anecdótico incluyo el enlace a una web que se denominada “Cementerio para blogs abandonados” el mismo... abandonado...